lunes, 19 de abril de 2010

CHC Las Rozas-HC Castellón: 6/2





Espectacular ambiente el vivido ayer en el Centro de Patinaje de Las Rozas, con las gradas a rebosar en un partido en el cual el público sabía que los Caníbales se jugaban todas sus opciones de seguir luchando por la permanencia en la Liga Élite, teniendo que disputar un partido muy complicado contra Castellón, líder del Grupo II. Los levantinos se presentaban en Las Rozas con unos números excelentes: líderes de grupo con seis victorias en ocho partidos (18 puntos), segundo equipo máximo goleador (43 goles, a uno de Alcorcón) y equipo menos goleado (24 goles). Por su parte los roceños se enfrentaban a un todo o nada, y cualquiera que mirase sus números(9 puntos, 23 goles a favor y 31 en contra) y los comparase con los del líder podría deducir que poco iban a poder hacer los roceños, un equipo recién ascendido frente a otro con muchas temporadas de experiencia y un título de la máxima competición en sus vitrinas. Pero los Caníbales no son los mismos pardillos de principio de temporada, a estas alturas de la competición se han convertido en un equipo tremendamente competitivo, y ayer era el día en el que tenían que demostrarlo y con esa idea entre ceja y ceja salieron a la pista.
A pesar de tener que jugar en pista grande fueron los visitantes los que se hicieron con las riendas del partido. Tenemos que recordar que el equipo de Castellón está plagado de fichajes, ayer hasta cinco jugadores foráneos vistieron la camiseta del líder, gente muy experimentada a la que no le costó adaptarse a la pista de Las Rozas y dominar el encuentro durante los primeros minutos. Sin embargo los roceños los roceños golpearon primero. A falta de 18:52 Tomas Fojtik aprovecho un rebote de un tiro de Carlos Zbroinsky para conseguir el primer gol. Y no tuvimos que espera mucho para que los locales marcasen de nuevo, a falta de 15:58 era Pablo Gijón el que anotaba a pase, otra vez, de Zbroinsky. Nueve minutos de juego y los locales comenzaban a destacarse en el marcador. Pero los castellonenses no estaban muertos, y en una excelente jugada fue Webb quien anotaba a pase de Araujo a falta de 13:58. Durante unos minutos siguió la igualdad en el encuentro, pero fue Sergio quien consiguió el tercero para los locales en una jugada un tanto afortunada a falta de 7:14. Poco después, cuando sólo quedaba 4:29 para el final fue Edu Paz quien consiguió anotar en una superioridad a pase de Sergio. Los Caníbales se ponían con un claro 4/1 que podía ser definitivo. Pero una expulsión para los locales daba aire a los castellonenses, que sin embargo no consiguieron anotar. Los locales se podían ir al descanso con una clara ventaja, pero otra expulsión a falta de 44 sg daba a los visitantes la oportunidad de meterse en el partido. Esta vez no la desaprovecharon y fue Araujo el que consiguió anotar a falta de 23 sg un gol que les daba esperanzas para la segunda parte. Los visitantes había conseguido anotar dos goles, y parece que esto no hizo ninguna gracia a Juanjo, portero Caníbal que decidió que ya se había acabado lo bueno para los visitantes y echó el cerrojo. A partir de ese momento nadie volvería a anotarle un gol.

Se reanudó el partido y los locales se dedicaron a mantener la concentración y presionar a unos castellonenses que ya comenzaban a dar muestras de cansancio, y fue a falta de 12:48 cuando se produjo una expulsión coincidente que resultó el detonante de lo que sería un final de partido cuando menos anecdótico. Minuto y medio después, a falta de 11:15, volvía a anotar Sergio tras aprovechar un excelente pase de Mini. Tras este gol vinieron dos expulsiones más, primero una en contra de Las Rozas y después otra en contra de Castellón, pero ninguno de los dos equipos supo aprovechar la ventaja. Y a falta de 6:54 se producía otra expulsión para un jugador de Las Rozas, y fue en esta situación de cuatro contra tres cuando se produjo un desgraciado lance que terminó de volver loco el encuentro: en un despeje desde detrás de la línea de gol David Christian recibía un golpe accidental en la cara que le produjo un corte. Pero lo malo para los castellonenses no fue eso, si no que con el juego parado agredió a un jugador de Las Rozas, lo que significó su expulsión definitiva a falta de 6:21. Para rematar la faena nueve segundos después era Araujo el que cometía su tercera falta, lo que significaba que no podía jugar en lo que restaba de partido. Y cinco segundos después, a falta de 6:07, era Mini el que conseguía el definitivo 6/2. Los seis minutos restantes se iban a convertir en una locura de partido, con situaciones de dos contra dos, inferioridades, y con los locales esperando el final del encuentro y unos castellonenses muy mermados por las expulsiones.

Al final, justa victoria de los Caníbales en un partido mucho más difícil de lo que puede indicar el resultado y que les deja con todas las opciones de mantener la categoría, aunque para eso tendrán que ganar en Bilbao el sábado que viene.

Sólo resta dar las gracias el numeroso público presente, que no paró de empujar a los jugadores caníbales durante todo el encuentro, lo que les hizo mucho más fácil el difícil reto de ganar al líder del grupo.

Seguidores

Archivo del blog

Datos personales

Mi foto
Entrenador Nacional de hockey en línea