Duro correctivo el recibido por los Caníbales en su partido contra Alcorcón en la pasada jornada. Tras la victoria de los roceños en el partido de ida y viendo la trayectoria de ambos equipos se podía intuir que se trataría de un partido reñido, y así fue durante toda la primera parte, con opciones para ambos equipos hasta que a falta de 6:04 Gonzalo Abella anota en un jugada polémica, en la cual es sancionado un jugador de Alcorcón por golpear al portero, pero los árbitros deciden que fue después de anotar el gol y lo dan por válido. Y entonces sucedió una situación bastante peculiar, durante un par de minutos ninguno de los dos equipos sabía lo que había pasado, si el gol era o no válido, si Alcorcón jugaba con tres o con cuatro, cuando el árbitro decide realizar el saque sin que los jugadores del equipo visitante estuviesen tan siquiera en la pista. El único que se enteró de que el puck era jugable fue Pablo Gijón, que estaba puesto en su sitio y cojió el puck y se fue solito hacia la portería y anotó el gol más absurdo de la jornada, con asistencia del señor colegiado. Tras esta situación tan esperpéntica con dos goles que no deberían haber subido al marcador siguió el partido con la misma tónica de igualdad, hasta que a falta de 59 sg Guille anotaba de envoltorio.
Y comenzó la segunda parte de lo que debería haber sido un segundo tiempo emocionante, pero poco a poco los alcorconeros se fueron haciendo con el partido hasta conseguir su tercer gol a falta 19:19, un gol que les daba una ventaja de dos goles, mientras que los locales, que habían tenido muchas oportunidades en el primer tiempo pero que no habían transformado, empezaban a perder la disciplina táctica y los visitantes se iban haciendo con el mando del partido. Pero un 1-3 era remontables, la semana pasad habían estado a punto de remontar un 4-1 en casa del líder y no había que dar por muertos a los Caníbles. Pero a falta de 11:24 una expulsión para los locales marcó el principio del desastre: gol de Alcorcón en superioridad y a partir de ahí los roceños se fueron del partido, encajando gol tras gol hasta llegar al abultado 1-9.
Mal resultado para los locales, y no sólo por la derrota, si no por el esperpento del final del segundo tiempo, en el cual se fueron absolutamente todos del partido. Tras una buena trayectoria ha venido este resultado que no se esperaba y que da un toque de atención al equipo. La próxima jornada tenemos partido en casa contra el España, un encuentro intrascendente, pero la siguiente tenemos que visitar Torrevieja en un partido fundamental para las aspiraciones de ambos equipos, donde esperemos que esto no se repita.
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